Esteban había pasado por muchas terapias con resultados que yo creía era muy pocos, porque toda madre sabe y siente el potencial de su niño. Para ser sincera, quise probar un mes, y antes de finalizarlo Esteban mostró un cambio extraordinario, aprendió a señalar, a comunicarse, a decir más palabras con intención y lo más importante para mí fue que pudo mantenerse sentado por más de una hora realizando actividades que contribuían con su aprendizaje, recién vi que mi hijo sí podía todo y con todo, sólo necesitaba tener a los profesionales adecuados, que le enseñaran y motivaran. Realmente estoy muy contenta y agradecida porque cada semana mi hijo me sorprende. Y lo que me encanta es que son un equipo, que trabajan por objetivos medibles.